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La humedad, la temperatura y los organismos invisibles
En el caso de los museos además de ser imprescindible cuidar el aire que respiran sus trabajadores y visitantes, también es esencial para la buena conservación de las obras que se exponen.
La humedad, la temperatura y los microorganismos pueden causar daños irreversibles en las obras de arte. Disponer de un adecuado sistema de renovación y purificación de aire es hoy día un acto de responsabilidad social para con la salud de las personas.
Asimismo, la tecnología actual permite concebir dichos sistemas no ya como un gasto, sino como una inversión por la alta eficiencia de los equipos. Salud, eficiencia y sostenibilidad, tres conceptos que nunca como hoy habían ido tan de la mano.
